Aprobado por Dios
Una de las formas en que sacamos a Dios es buscando la aprobación humana en lugar de la aprobación de Dios. La elección no siempre es evidente. Al tratar de hacer un buen trabajo y representar bien a Dios, podemos comenzar a equiparar la aprobación de los demás con la aprobación de Dios. O podemos ignorar los aportes de los demás en la medida en que no discernimos la guía que Dios quiere darnos a través de ellos. Dios nos insta a pasar tiempo en las Escrituras, la oración y la reflexión para buscar su sabiduría.
Obviamente, no estoy tratando de ganar la aprobación de las personas, sino de Dios. Si complacer a las personas fuera mi objetivo, no sería el siervo de Cristo. —Gálatas 1:10 NTV
Oración:
Dios, sintoniza mi corazón con Tu voz a través de las Escrituras, la oración y la meditación sobre Tu verdad. Déjame seguir a Tu Espíritu mientras sigo el llamado que me has dado. Quiero vivir para complacerte, como Jesús, en cuyo nombre oro, amén.
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