Corrección que da vida
Proverbios 15: 31-32 nos recuerda la naturaleza autodestructiva de aquellos que ignoran la disciplina. Las palabras antiguas suenan como si pudieran haber sido escritas hoy. El orgullo todavía nos atormenta, ¿no es así? Nosotros, como las personas de todas las épocas, tendemos a pensar que tenemos que actuar como si lo tuviéramos todo junto. Pero cuando las cosas van mal, es la humildad, no el orgullo, lo que nos permite reconocer nuestra necesidad de una corrección vivificante. ¿Recibirás la corrección que Dios anhela darte? ¿Qué te está diciendo mientras esperas ante Él?
El que escucha la corrección que da vida, se sentirá como en casa entre los sabios. El que ignora la disciplina se desprecia a sí mismo, pero el que hace caso de la corrección gana entendimiento. – Proverbios 15: 31-32
Oración:
Señor, abre mi corazón y mis oídos a Tu voz, Tu corrección. No quiero que el orgullo me lleve a la destrucción. Enséñame a desear la vida, la sabiduría y el entendimiento que trae tu corrección. En el nombre de Jesús, amén.